Dash
Dash apareció relativamente antes que otras criptomonedas populares. Su arquitectura única de dos niveles se creó en 2014 basándose en el código ya preparado de Bitcoin. Dos años más tarde, la propia criptodivisa y sistema de pago Dash ganó popularidad en decenas de países, logrando atraer tanto a inversores institucionales como privados.
Cualquiera que desee pagar con estas monedas bienes y servicios o realizar transferencias puede hacerlo de forma anónima e instantánea. Los usuarios se han aficionado tanto al Dash que cientos de conocidas tiendas online de distintos países han empezado a aceptarlo.
El código fuente de Bitcoin no ha impedido a sus creadores desarrollar diferencias significativas y ganar adeptos entre los usuarios. En primer lugar, el sistema puede actualizarse en cualquier momento y seguir siendo técnicamente perfecto sin demasiada dificultad.
Además, todas las transacciones son realmente anónimas. Eso significa que no quedan rastros de las transferencias en la red, como si usted llegara al lugar y pagará la compra en efectivo. Esto no está al alcance de los usuarios de Bitcoin, ya que sus transacciones se publican en la blockchain, donde quedan a disposición de todo el mundo.
Además, Dash se caracteriza por la estabilidad, la protección contra la piratería informática y el tamaño de las comisiones, que tienden a ser cercanas a cero.
Se cree que la tasa de la criptomoneda DASH no depende de la situación económica en el mundo, y se puede transferir a cualquier otra moneda tradicional o digital a la tasa interna.